28 de octubre de 2009

Música: The Snake Corps


No estaba. Tenía que estar.

Aunque se trata de un tema que muchos prefieren ignorar, debido en gran medida a que en su momento sonó demasiado (por aliteración, no por volumen) en las cabinas de los DJs mediterráneos de principios de los noventa, he de reconocer que me sigue pareciendo fascinante. "This is seagull..." es el duodécimo corte del segundo LP de los Snake Corps, titulado Smother Earth, y editado por Midnight Music en 1990.

Podéis escucharlo, descargarlo y/o compartirlo accediendo al Chinchibox:


The Snake Corps se formó en Londres en 1984, cuando el guitarrista Tristan Garel-Funk y el percusionista Nigel Pollard dejaron la banda Sad Lovers & Giants debido a la tensión existente entre sus miembros. Garel-Funk y Pollard decidieron entonces publicar un anuncio en la revista Melody Maker solicitando músicos que estuvieran interesados en formar parte de su nuevo proyecto. Tras muchas pruebas, se quedaron con el vocalista Marc Lewis y con el bajista Liam McGuinness.

Lewis acabó compartiendo piso con Garel-Funk. Pollard abandonó el grupo antes de haber grabado el primer disco.

Cierto día de 1991, la banda se despertó y se encontró con que no sólo no tenía sello discográfico (Midnight Music había desaparecido), sino que los derechos de publicación de sus propias canciones habían sido transferidos, sin su consentimiento, a otra compañía.

Ese día se acabó casi todo.

Disfrutad. Un abrazo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No se porqué, pero me recuerda a No Expectation Boulevard, de Vangelis. Aunque ésta es más bien una máquina que avanza por un planeta desolado...

Me encanta tu blog. Papi

Chinchi dijo...

Muchas gracias, Papi.

A mí, "This is Seagull..." siempre me ha recordado más al vuelo de la gaviota que a la propia gaviota, no sé por qué.

Sin tomar tu comentario como un augurio catastrofista, me he sorprendido pensando en cámaras de seguridad camufladas en gaviotas de lata, planeando sobre el cielo blanco de una Tierra devastada (en un hipotético futuro apocalíptico, por supuesto). Es una imagen bella y horrible a la vez.

Hasta pronto. Te quiero.